CPA Online ofrece su Curso de Edición de Vídeo con AVID y el Curso de Final Cut para que cualquier profesional o entusiasta de la edición y el montaje puedan aprender la utilización de los software más extendidos en el sector profesional.
Pero la tecnología y su uso, en determinados momentos, hacen que perdamos perspectiva sobre el arte y el oficio del montaje. Por eso, en esta serie de posts que inauguramos aquí, intentaremos adentrarnos en la parte más teórica del montaje, dando unas pinceladas de distintas clasificaciones que podemos encontrar.
A lo largo de la historia del cine, podemos encontrar diferentes clasificaciones acuñadas por otros tantos autores: desde Puvodkin o Arnheim hasta Eisenstein y Gubern han intentado categorizar el difícil arte del montaje, siempre con clasificaciones, algunas de ellas muy conocidas, pero controvertidas e incompletas en su naturaleza o concepción, como veremos.
Dos montadores en la sala de edición
El manejo y conocimiento de las técnicas del montaje y su combinación expresiva con el tiempo, el espacio y la idea son características que deben estar presentes en el montador, además de ser requerimientos específicos de otros profesionales como pueden ser el director o realizador. El montaje está presente desde el principio de todo proyecto audiovisual, incluso está claramente presente en el mismo guión de la obra.
Aunque el proceso de montaje tiene que realizarse en el proceso de postproducción, el proceso intelectual del mismo tiene que estar planificado desde la preproducción, para cumplir en el rodaje o producción con lo proyectado y llegar a la sala de montaje con el material y los recursos registrados suficientes para que dicho proceso de edición sea un éxito.
Igualmente, el montaje se puede realizar a partir de imágenes que se han registrado sin una planificación previa (es el caso de muchos documentales), dándoles un sentido y significado particulares. Ahora veremos, en diferentes clasificaciones del montaje históricas, cómo encontrar o qué técnicas utilizar para dar ese sentido a nuestra edición con los software AVID o Final Cut que facilitan el trabajo y el arte del montador respecto a otras técnicas anteriores, donde se trabajaba directamente con celuloide o con cintas magnéticas de vídeo.
Los antiguos montadores ante una guillotina para cortar los fragmentos de celuloide escogidos
Ayudante y Auxiliar de Dirección en diferentes series y proyectos audiovisuales (“Los Hombres de Paco”, “Bienvenidos al Lolita”,…). Crítico de Cine en la revista especializada “Caimán Cuadernos de Cine” y en su blog “El Chatarrero Audiovisual”. Docente de Marketing Online y Community Manager. Diplomado en CC. Empresariales por la Universidad de Salamanca, Diplomado en Cinematografía y Artes Visuales (Dirección Cinematográfica y Realización de Televisión) por la Universidad de León y Posgrado en Community Manager por la Universitat de Barcelona y la Escuela de Administración de Empresas.
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