Antipop o antiviento ¿qué necesito?

Como ya hemos comentado en algún post anterior de nuestra sección de sonido, los sonidos “pop” se producen por pequeños golpes de viento en la articulación de consonantes como P, B, D y T. Son las consonantes oclusivas orales o “explosivas”.

Se las llama así porque se escuchan como una pequeña explosión, cuando el golpe de viento impacta de forma directa en la membrana del micrófono. Para combatir ese efecto, habrá que echar mano de una serie de accesorios específicos.

Al hablar de antipop, nos referimos más que nada al capuchón de gomaespuma de los micrófonos vocales o de reportero. Muchos micrófonos vienen de fábrica protegidos por la construcción de su rejilla contra los citados sonidos pop. En estas situaciones, una protección extra de gomaespuma no aporta gran mejoría.

Caso diferente es el de los micrófonos destinados a grabar instrumentos, canto o locución. En estos casos, las pantallas de gomaespuma serán de gran ayuda.

Recuerda que, para la mayoría de los micrófonos, existe un antiviento a medida. Al protector de gomaespuma, popularmente llamado “antipop”, los fabricantes normalmente lo llaman “antiviento”. Se debe a que los ruidos del viento en las grabaciones en exteriores o en los eventos en directo se evitan mucho mejor si usamos una pantalla de gomaespuma en vez de las articulaciones pop.

Una pantalla de gomaespuma puede servirnos además para interior. En caso de que no se guarde la distancia suficiente respecto al micrófono, se puede echar mano de un antiviento para amortiguar algo los sonidos de la respiración y proteger al cantante o locutor de la aspereza de la rejilla del micrófono en los labios.

En el mercado, la pantalla antipop recibe varios nombres: Popkiller, Popstopper o filtro antipop, malla antipop, etc.  

Una herramienta reciente

Lo cierto es que la pantalla antipop es un invento relativamente moderno. En la década de los 70, había dos opciones: o trabajar sin protector ante las articulaciones pop, separándose mucho del micro, o usar un antiviento de gomaespuma.

Después, a comienzos de los 80, la intención era obtener un sonido más transparente y rico en frecuencias altas. Teniendo en cuenta que los protectores de gomaespuma robaban agudos y se requerían distancias más cortas del micrófono, se investigaron nuevas soluciones hasta llegar a la pantalla antipop.

Las pantallas antipop se fabrican a día de hoy en diferentes acabados. Las hay con dos capas de tejido, con una sola, con un mecanismo de plegado para regular el “nivel de filtrado”, etc.

Hay además modelos de pantallas antipop de metal que no bloquean la corriente de aire sino que la desvían para que no llegue a la membrana del micrófono. Estas pantallas antipop de metal nos ofrecen un sonido especialmente transparente. Por su parte, las pantallas de malla de tejido protegen mejor de salpicaduras de saliva en la membrana del micrófono.

En el ámbito del cine, la TV y la radio se usa con frecuencia, para grabaciones especiales, una protección antiviento especial de pelo. Coloquialmente se le llama “gato muerto”. Este tipo de protección es todavía más efectiva que las de gomaespuma. La razón es que el viento queda atrapado en los finos pelos antes de que pueda llegar a la membrana del micrófono.

Incluso en días de viento suave será imprescindible una pantalla protectora antiviento de pelo para lograr unas grabaciones limpias.