La iluminación juega un papel muy importante en cualquier tipo de producción, por eso hoy vamos a hablar de los diferentes significados que tiene la luz en el teatro. El color, la intensidad o la orientación son algunos factores que determinan el mensaje que se quiere transmitir a los espectadores.
- Crear un ambiente. Uno de los significados de la iluminación en un escenario es la de crear el ambiente que se quiere representar. Una luz con tonalidades azules, es decir fría, suele generar una atmósfera romántica, misteriosa, intriga… Por otra parte, las luces más cálidas y amarillentas se suelen emplear en momento de tranquilidad.
- Definir climatología. Una de las formas para contextualizar al espectador de una obra de teatro sobre la climatología de la representación es hacerlo mediante las luces. Las más cálidas se asocian a un momento soleado, de buen tiempo; mientras que los colores fríos a la noche, a un día nublado. Se suele acompañar con signos acústicos para facilitar la recreación.
- Especificar un lugar. También la luz tiene un papel esencial para determinar un lugar. Una zona oscura y un rayo de luz para mostrar una cueva, un túnel, una ventana en una habitación a oscuras… La iluminación en teatro a veces puede sustituir al decorado completamente y el espectador imaginar en todo momento en qué lugar se encuentran los personajes.
Identidad de los personajes. Y por último también ayudar, en ciertos momentos de la obra, a identificar a los personajes. Según el color de la luz que los muestre, así como la intensidad con la que se proyecte, puede dar una u otra sensación al público. También la orientación con la que se enfoque puede mostrar al personaje de una determinada manera: más misterioso, aislado…
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